Fe: sin la Razón y sin Dios
La fe es la confianza en algo, en su
valor, en su cumplimiento, en que ha de venir, en que ha de llegar. La razón se
refiere al juicio correcto, a tener buen juicio. En la razón concurren empero
dos potencias: la lógica, el razonamiento lógicamente válido, bien construido,
apegado a normas de inferencia, y la psicológica, el razonamiento justo, bien
orientado. La fe, la confianza en la razón, es característica del racionalismo,
del espíritu de la ilustración, más que ateo, en el fondo indiferente en
materia de religión, de más allá, de otra vida, de otro mundo -fe en la razón en la que ya tampoco se cree
con fe viva. Las filosofías irracionalistas ya no creen, sin embargo, en
progreso indefinido de la razón, ni que la razón sea la potencia que determine
el comportamiento humano, sino otras potencias, no digamos ya el amor, o la fe
religiosa, sino más bajas, más animales, más rudimentarias, groseras e
inmediatas: el impulso, la tendencia, el mero hábito. Se puede entonces creer
en... en... la rabia... en la rabiosa voluntad de poderío... Las filosofías
irracionalistas seguirán siendo, en contra de la razón y todo, y si no pues
simplemente se callan -para dejar de ser...!!!
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